Razones para leer: El límite del placer

Buenos días, siento la tardanza en subir esta reseña, me fui de viaje y después se me olvidó programarla y lleva en borrador una semana. Que torpeza la mía. En fin, aquí tenéis una nueva trilogía erótica, de la mano de la editorial Tercipelo, que se adentra en el mundo BDSM con algo más de seriedad. Eve Berlin nos presenta el primer volumen: El límite del placer.

El límite del placer

¿Hasta dónde estás dispuesta a llegar para conocer los límites de tu placer?

Para la autora de novela erótica Dylan Ivory, el control lo es todo, ella lleva una vida organizada y segura, estable, sin riesgos. Hasta que se topó con Alec, un hombre que era todo lo contrario a ella... pero que era todo lo que realmente quería ser.

Alec Walker es un escritor de thrillers psicológicos y un hombre que vive al límite. Las motos, el snowboard, nadar entre tiburones, nada es demasiado arriesgado ni demasiado peligroso para él. Y ese riesgo también se extiende a sus gustos en el dormitorio. Alec encuentra el placer en la dominación y es en su club de BDSM donde da rienda suelta a sus deseos. Como labor de investigación y documentación para su próxima novela, Dylan mantiene un encuentro con Alec y éste la invita a probar los placeres que se ocultan tras ese delicioso fruto prohibido que es el mundo del BDSM. Alec quiere demostrarle que no hay placer más sublime que la sumisión y, con esa idea en mente, la tienta a probar el placer infinito. Pero, ¿sabrá él mantenerse firme ante la primera mujer que es capaz de hacerle doblar las rodillas? ¿Será Dylan capaz de conquistar su corazón?

Esta novela pretende ahondar en el tema de moda, el BDSM. Sigo pensando que hablamos con demasiada frivolidad sobre algo que a mi me parece bastante serio y este tema se trata en una novelas como algo circunstancial, como una excusa para atar a alguien, darle unas palmaditas y hacer que la escena sea más intensa, como si escribir una escena erótica convencional no fuera suficientemente intensa.

Tenemos a Dylan, una escritora de  novela erótica que necesita documentarse para su nuevo libro. Logra ponerse en contacto con Alec, un Amo que además resulta ser también un escritor, pero de thrillers porlicicos. Tras una primera cita para hablar sobre el tema que los ha reunido, que son nociones básicas sobre dominación y sumisión, llegamos a la conclusión de que para poder entenderlo, hay que hacerlo. Así que sin más preámbulos y sin anestesia, nos adentramos en el mundillo del sexo fetichista y los azotes. 

Ya en el primer capítulo, los diálogos del primer encuentro entre ambos protagonistas te deja con la sensación de que algo falta. Los tecnicimos y la intención de querer aclarar cada una de las cosas hace que el desarrollo sea frio y completamente insustancial. En las primeras páginas encontramos una gran contradicción, y es que entramos de lleno en el tema sin un juego previo que pueda ponernos en situación. Por un lado, tenemos unos diálogos que están ahí, pero no aportan nada, y luego escenas eróticas que tampoco hacían faltan, para finalmente llegar a lo que realmente importa, que es que ambos protagonistas tengan su primer contacto. No sé si me he explicado bien, pero los primeros episodios, sobran bastante.

Dylan es un personaje que en teoría es escritora, pero no lo parece, porque su oficio es completamente circunstancial, ya que apenas se desarrolla esta faceta suya. Debido a un trauma del pasado, ha forjado un carácter y una forma de ser fuertemente independiente. Quiere tenerlo todo controlado, que nada se salga de los límites que ella misma se ha establecido y no quiere que una relación profundice más allá del sexo. Por su parte, Alec es un hombre dominante, que también es escritor, que frecuenta un club elitista y que pretende enseñarle a Dylan todo sobre el BDSM para que ella tenga unas buenas referencias a la hora de escribir. Una teoría que, sinceramente, no sé cómo definir.

La trama girará en torno a la historia de los personajes, en continua lucha con sus propios sentimientos, planteándose una y otra vez qué es lo que desean, si es bueno dejar atrás los principios y las férreas ideas a las que se acogieron una vez y continuar hacia adelante con unas nuevas. No se profundiza en el erotismo ni en el placer, no se buscan límites el uno al otro cuando el tema que tratan va sobre eso mismo, simplemente son dos personajes que se gustan, que se complementan, que juegan duro en el sexo y que no saben si quieren estar juntos o separados.

El desarrollo de la historia se queda al principio, no hay nada más allá de la relación entre ambos y ni siquiera el punto de partida, enseñarle a la chica los secretos de la dominación y la suminsión, tiene una resolución. Todo se queda a medio camino, sin ir más lejos y los diálogos que pretenden ser picantes, a veces caen en largos monólogos sobre tecnicismos que generan poco interés.

Sin embargo no todo va a ser malo. Doy por satisfecha la lectura, aunque podría haber sido mucho más. El estilo y la lectura son buenos, la psicología de los personajes está bien planteada aunque se queden en la superficie y las historias personales de cada uno, que son los motivos por los cuales se comportan de esa manera, me han parecido muy interesantes. Es un libro trabajado y bien documentado, aunque se queda en la superficie de un tema que podría haber dado mucho más. Como es el primero de una trilogía, supondremos que los siguientes estarán mejor trabajados. Yo le doy una recomendación, aunque no es tan intenso como otros que he leído.

El siguiente libro tiene por título El límite del deseo, y estará en las librerías el próximo mes de Abril. Más información en la web de Terciopelo. Nos leemos.

1er capítulo El límite del placer

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Serie: Ficción

Autor: Berlin, Eve

ISBN: 978-84-15410-32-4

Publicado: 29/10/2012
Páginas: 240

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