Razones para leer: Tiéntame en la oscuridad

Regresa la sección de reseñas, un poco tarde porque me han caído varios libros a la vez y se ha juntado con el poco tiempo para poder leerlos a placer. En esta ocasión, y gracias a la editorial Esencia por su aportación, traigo nuevamente una novela de romance paranormal, pero con el aliciente de estar escrito por una de las escritoras de novela erótica que más me gustan: Shayla Black. El libro se titula Tiéntame en la oscuridad y es el primer libro de la serie Los inmortales de Brenthren.
La magia nunca había sido tan devastadoramente sexy.
Tiéntame en la oscuridad: Los inmortales de Brentrhen I

Marrok de Cadbury era un guerrero fiel y leal de la corte del rey Arturo, hasta Morgana le Fay, una antigua amante despechada, recurre a la brujería y al Libro del Caos y lo condena a la inmortalidad y a no sentir jamás placer sexual. Quince siglos más tarde, Marrock es escultor y vive en Londres. A pesar de haber recuperado el Libro del Caos, no es capaz de abrirlo para romper la maldición, hasta que conoce a Olivia Gray, una bruja que desciende de la mismísima Morgana. Marrock y Olivia inician una intensa y apasionada relación que se ve enturbiada con la aparición de un brujo despiadado que ha regresado del exilio y está reclutando un éjercito del mal. Cuando descubre que Marrock y Olivia tienen el Libro del Caos, sólo el amor que ambos se profesan podrá salvarlos.

La novela está ambientada en la actualidad. Nuestro protagonista masculino, Marrok, es un guerrero de la corte artúrica en pleno siglo XXI, acosado por pesadillas que bien pueden ser producto de su maldición. Exageradamente guapo, en buena forma, lleno de cicatrices, lealtad, honor, deber y unos modales chapados a la antigua (el pobre es del siglo V, no podemos pedir más). Es un hombre que en mil años de vida no ha podido obtener satisfacción y para más horror, no puede acabar con su horrible frustración acabando con su propia vida porque la maldición lo hace inmortal. Está sumido en una profunda rabia, lleno de odio y rencor hacia la bruja Morgana, que lleva años muerta. Su único amigo es Bram Rion, un hechicero descendiente de Merlín.

En el otro lado tenemos a Olivia, una muchacha huérfana que no ha tenido amor en su vida. Su única familia era su madre, una mujer que nunca la quiso y que siempre consideró a Olivia una carga. Falta de cariño, Olivia trata de aliviar su soledad siendo absolutamente independiente, abriendo su propia galeria de arte, su sueño desde pequeña; mientras, trata de encontrar a su padre biológico, del que nada ha sabido en todos estos años.

Dentro de la novela se ha creado una sociedad, la de los Hechiceros. Magos que desde los tiempos de Merlín viven en secreto, divididos en clanes familiares según sus especialidades mágicas. Hace mucho tiempo que las familias más poderosas se distanciaron de las familias que lo eran menos y, como siempre ocurre, los ricos oprimen a los pobres y de entre el pueblo llano surge una figura revolucionaria que quiere cambiar el mundo. Y al final esa figura revolucionaria se convierte en el ser más horrible del mundo. Este será el villano de la historia, Mathias d'Arc, un hechicero cuyos ideales parecían honorables al principio; pero su máxima el fin justifica los medios fue llevada al extremo y la ambición y el exceso de poder hicieron de él un mago tenebroso y oscuro. Hace años que fue derrotado durante un grave conflicto, pero ahora, ahora que Marrok ha encontrado el Libro del Caos, aquel en el que Morgana escribió su maldición, Mathias se ha revuelto en su tumba y ha resurgido de sus cenizas para traer el horror y la destrucción al mundo mágico. Todo muy harrypottesquico (toma término) pero con el aditivo de que sus protagonistas son adultos y no adolescentes simplones (conste en acta que soy fan del mundo mágico, pero su protagonista me cae fatal).

La historia comienza, como cabría esperar, cuando Bram, el hechicero amigo de Marrok, presenta a Olivia. Al instante, el guerrero inmortal se siente irremediablemente atraído por la chica. Y digo atraído, no enamorado, porque en lo único que puede pensar cuando la ve es que quiere poseerla de todas las maneras posibles y cuantas más veces mejor. Esto es muy del estilo de Shayla Black, las atracciones salvajes y posesivas entre los personajes: él, un guerrero fuerte y dominante, que desea obtener la atención de una mujer que habitualmente tiene baja autoestima y lucha por sobrevivir en un  mundo dónde nadie la aprecia. La combinación de los capítulos vistos desde el punto de vista masculino y el punto de vista femenino descubre la forma en que los dos personajes se sienten atraídos de la misma forma, pero la manera de actuar es diferente. Mientras Marrok es un salvaje que no deja de acosar a Olivia, ella trata de mantener la distancias todo lo que puede hasta que ya es demasiado tarde.

El libro no deja nada a la imaginación. Shayla Black describe paso a paso los encuentros de los protagonistas, que no son pocos. Más que novela romántica, yo la hubiera catalogado como erótica, porque aunque la historia en sí trata del amor que profesan ambos personajes englobada en un trasfondo más amplio, como es el regreso de Mathias y el consiguiente peligro que conlleva para la comunidad mágica, pasan desnudos la mayor parte del tiempo. No tengo inconveniente con ello, las escenas entre ambos personajes son tan tórridas que tener un respiro de vez en cuando viene bien. No puedo pedirle a Shayla que escriba fantasía con la misma pericia que escribe erótica, por lo que la historia resulta un poco simple. En esto mi criterio no debería tenerse en cuenta, porque la novela no trata de fantasía, sino de romántica, así que no soy muy exigente con ello. El libro deja buena impresión, la historia se sostiene y el argumento cierra como cabe esperar. Le falta acción, pero queda compensado con unas escenas que quitan la respiración; la tensión se respira en cada palabra, en cada párrafo. En definitiva, un libro apasionado y lleno de tórrido romance, salpicado con dósis de dominación (le faltan los fetiches para ser perfecto) y una buenta cantidad de sexo desenfrenado y con sentido (y consentido, já xD).

En otro orden de cosas, tenemos la amalgama de personajes presentados en el libro. Comenzando por Bram Rion, un hechicero guapo y seductor, rico y yo diría que un tanto fetichista. Su hermana Sabelle, una hermosa hechicera de modales perfectos (hasta aquí todo bien, ya que son británicos); y el resto de miembros de la comunidad mágica son un grupo variopinto de magos: un hechicero enamorado de su esposa de la que no se puede despegar, un sofisticado miembro de la realeza mágica, un mago de dudosa lealtad... Todos estos personajes forman un conjunto que define claramente cuales serán los futuros protagonistas de las siguientes novelas de la saga. El libro, aunque cierra el argumento principal, tiene un final abierto que permite su continuación. Hasta la fech, hay publicadas cuatro novelas, la quinta ha salido este mes. Veremos como se desarrollan los demás argumentos ;)


464 páginas, Idioma: Español
ISBN: 978-84-08-10025-6
Colección: Novela romántica, Editorial: Esencia (Planeta)
Formato: 14,5 x 21,5 cm, Tomo 1
Encuadernación: Rústica con solapas



2 intimidades:

  1. ¡Que pedazo de reseña!, a esto lo llamo yo reseñar de verdad!, jejeje.

    Me encanta como escribes, como cuentas las cosas, la facilidad que tienes a la hora de expresarte... esto es lo tuyo querida!, nunca dejes de escribir x k sino el mundo perdería a una gran escritora!.

    Saludos mi niña bella, tkm!, muak!

    ResponderEliminar
  2. Anónimo22:13

    Muy buena reseña... lamentablemente yo el libro fui incapaz de pasar del capítulo 3 ¬¬

    En fin... tendré que volver a cogerlo de mejor humor, a ver si así me lo leo del tirón ^^

    Besitos

    ResponderEliminar

¿Qué te ha parecido esta intimidad?